Existe cada vez más evidencia que destaca los beneficios de invertir en las niñas alrededor del mundo. Invertir en las niñas no es solo una buena causa y responsabilidad de todos como humanidad, sino que también, es un movimiento estratégico para empresas y gobiernos para el crecimiento y desarrollo de las sociedades. La inversión en las niñas se ve reflejada en múltiples dimensiones:
Crecimiento Económico y Desarrollo:
Incremento en la Productividad Económica: investigaciones del Banco Mundial destacan que la educación escolar en las niñas tiene un beneficio económico directo. Las mujeres con educación escolar tienden a tener ingresos
Incremento en la Productividad Económica: investigaciones del Banco Mundial destacan que la educación escolar en las niñas tiene un beneficio económico directo. Las mujeres con educación escolar tienden a tener ingresos más altos, iniciar negocios y aumentar la productividad de sus comunidades. Se estima que por cada año adicional de escolaridad de una niña, sus ingresos futuros pueden aumentar entre un 10 - 25%.
Cerrando la brecha de género: El McKinsey Global Institute prevé que al cerrar la brecha laboral el PIB global podría aumentar hasta en $12 trillones de dólares para 2025. Las niñas con educación escolar impulsan el crecimiento económico equitativo e inclusivo que beneficia a naciones enteras.
Efecto Multiplicador: las niñas con educación escolar tienen más posibilidades de volver a invertir en sus familias y comunidades, sacando a generaciones enteras de los ciclos de pobreza. El poder económico de las mujeres se extiende a toda la comunidad y contribuye al desarrollo a largo plazo.
Mejora en la Salud:
Disminución de las tasas de mortalidad materna: las niñas con educación escolar tienen menos probabilidades de tener embarazos no deseados en la adolescencia y convertirse en madres a temprana edad. Suelen casarse
Disminución de las tasas de mortalidad materna: las niñas con educación escolar tienen menos probabilidades de tener embarazos no deseados en la adolescencia y convertirse en madres a temprana edad. Suelen casarse más tarde y planificar sus familias, evitando el matrimonio infantil, que está vinculado a las altas tasas de mortalidad materna.
Mejora de la salud infantil: las niñas con educación escolar tienen más probabilidades de comprender la importancia de la higiene, la atención médica y la prevención en salud, lo que según Unicef aumenta la posibilidad de los hijos de madres educadas tengan más probabilidades de sobrevivir a enfermedades infantiles y prosperar.
Deporte como Herramienta de Desarrollo:
Liderazgo y Autoeficacia: las niñas que practican deporte pueden cultivar el liderazgo, la resiliencia, la confianza y la autoeficacia entre otras habilidades. ONU Mujeres enfatiza que los programas deportivos para niñas
Liderazgo y Autoeficacia: las niñas que practican deporte pueden cultivar el liderazgo, la resiliencia, la confianza y la autoeficacia entre otras habilidades. ONU Mujeres enfatiza que los programas deportivos para niñas permiten su desarrollo personal y la apertura de oportunidades profesionales en el futuro.
Beneficios Económicos de las Niñas en el Deporte: Según la UNESCO, aumentar la participación de niñas y mujeres en el deporte genera valor económico que va desde reducir los costos de atención médica debido a estilos de vida más saludables a generar ingresos a través de ligas deportivas al ser un mercado aún poco explotado.
Impacto Educativo en la Sociedad en General:
Impacto Social y Crecimiento Comunitario: invertir en la educación general de las niñas permite que se de lo que se conoce como “The Girl Effect”, que es un efecto multiplicador positivo para la vida de las personas y sus comunidades. Donde las niñas
Impacto Social y Crecimiento Comunitario: invertir en la educación general de las niñas permite que se de lo que se conoce como “The Girl Effect”, que es un efecto multiplicador positivo para la vida de las personas y sus comunidades. Donde las niñas al convertirse en mujeres hacen de su conocimiento una cascada que salpica a toda la población en temas económicos, de salud y desarrollo.
Inclusión Social: dar acceso a las niñas a espacios educativos y deportivos permite la inclusión e integración social permitiendo a las niñas ser parte de la vida pública y no estar restringidas únicamente a la vida doméstica.
Desafiar los Estereotipos Sociales: tener acceso a la educación y el deporte permite a las niñas y la comunidad en general a cuestionar narrativas y estereotipos respecto al género, los privilegios y los roles asignados por la sociedad.